No es un dulce que yo cocine muy a menudo y mucho menos en estas fechas, que faltan 3 días para que empiece el verano, además de tanto en tanto, todavía las cocina mi abuela, pero es que de pronto me ha entrado un poquito de morriña y son tan sencillas de hacerlas que me he dicho – ¡venga va, hazlas! -, y aunque las mi abuela están más ricas, estas rosquillas de pueblo también se dejan comer.
Los ingredientes
3 huevos, 1 taza de aceite de oliva suave, 1/2 taza de leche, la ralladura de un limón, 2 cucharaditas de levadura química, 80 gramos de azúcar, 500 gramos de harina, aceite para freír y azúcar para rebozar.